Cole Blue ha ganado una reputación como uno de nuestros jugadores estrella del equipo. También es uno de nuestros miembros más experimentados del club; él representa#039; es entrenado con lo mejor de lo mejor aquí en las instalaciones. Así que, cuando se sugirió que lo tomaría bajo mi ala, me preguntaba realmente por qué yo, entrenador Navarro, tenía n caer#039; no se me preguntó antes.
Antes de llevarlo hice mi evaluación estándar. Me reveló que había tenido problemas para concentrarse hasta tarde; reclamó que estaba envuelto#039; que había sido empujado a su límite físico y allí estaba lleno#039; no le quedaba mucho para aprender cuando llegó al campo. Ahora esto me dio una idea-si Cole sintió que sus límites físicos habían alcanzado el pico, entonces tal vez podríamos empezar a entrenar su estado mental.
Me metí en mi casa para ver a Cole de pie en mi porche. Tenía una gran sonrisa en su cara, como si de alguna manera hubiera sabido que sólo la idea de él casi me envió a un clímax antes. Una vez que nos instalamos dentro, sin embargo, esa sonrisa fue manipulada por una especie de nerviosismo cuando le dije los detalles completos de esta sesión. Empleaba un tipo de hipnosis suave, pero le aseguraba que estaría cuidando bien de él y no había nada de qué preocuparse. Su vacilación se desvaneció tan pronto como se puso en el sofá.
Se llevó a mis palabras instantáneamente, como las necesitaba. Se hundió en mi hipnosis y reveló lo que estaba en su mente subconsciente; sus manos se frotaron bajo sus pantalones con los ojos cerrados. Encontré mis propias manos también yendo hacia mi ingle, como si su hipnosis fuera mía...