No pensé que podría conocer a alguien que me hace tan salvaje como el Dr. Wolf. Todo sobre él desencadena mis deseos más profundos. No sólo es un médico guapo, sino que él mismo #039; es un gigante de la casa de poder absoluto! Estando a su alrededor, siento que podría aplastarme y dominarme y arrojarme por ahí. Pero más a menudo que no, sólo quiere golpearme y mantenerme apretado en sus brazos grandes.
Cuando me trajo a su habitación, inmediatamente quería sentir sus labios sobre los míos. Es tan sexy como se inclina bajo para conocerme, anhelando su cuello para bajar a mi nivel. Para un gigante, él toca#039; es sorprendentemente suave. Pero él ##039; está muy claro sobre lo que quiere.
A medida que me quita la ropa y me lleva la ropa interior a mis rodillas, puede caer#039; no me ayuda sino agarrar mi trasero con sus patas masivas, jugando con mi carne e incluso darle un mordisco. Duele un poco, pero me encanta lo mucho que quiere devorarme. Y el sentimiento es mutuo.
Cada momento que nos tocamos #039; no estamos jodiendo, yo estoy pensando en lo bueno que fue la última vez y lo mucho que quiero de nuevo. Pero tengo que marcar mi ritmo. Su polla gigante es demasiado grande para tomar sin tener cuidado. Sabe utilizarlo bien, pero a veces mi paciencia no coincide con mi deseo.
Cuando el Dr. Wolf lo saca, su eje nunca deja de sorprenderme. De la longitud a la anchura a las t**rcas pesadas y de tamaño huevo que lo pesan, puedo experimentar #039; no creo que mi cuerpo sea capaz de tomarlo. Apenas encaja en mis manos, y mucho menos en mi agujero. Y mi boca no es capaz de llevarla todo.
Sabe que estoy desesperado por más que una mamada. Quiero ser penetrado profundamente, sintiéndole dueño de mi cuerpo y mi agujero. Le sigo diciéndole: " Yo me pondría#039; soy todo tuyo, yo me pondría#039; soy todo tuyo, y le invitaba a tomar el control y a arrasarme. Sé que él me hace sentirme mal, pero después de tiempo suficiente con su hombría en mi boca, me dolió #039; no me importa lo que se necesita para conseguirle bolas en mis entrañas.
Me pongo en Al...